lunes, 3 de marzo de 2014

Ensayo: El sentido del olfato.

Oscar Alejandro Sánchez Medina.

El Perfume: Historia de un asesino. Obra escrita por el autor austriaco Patrick Suskind, narra la historia de un hombre llamado Jean-Baptiste Greounille; es un joven que nace en las calles de Paris, Francia en el siglo XVIII en una época donde las calles e incluso las personas emanan hedores repugnantes por falta de limpieza. Grenouille extrañamente nació sin desprender ningún olor y al mismo tiempo poseyendo un don excepcional: un olfato prodigioso que le permite percibir todos los olores del mundo.
            Por su falta de olor Greonouille se obsesiona por crear una esencia que lo caracterice entre los que lo rodean y que para él, la única forma de conseguir esta esencia es asesinar a mujeres jóvenes.
            El olfato es un sentido importante para cualquier ser, ya sea un animal o humano. Nos ayuda a decidir y opinar sobre un objeto o lugar. Si algo huele bien muchas veces nos puede indicar una serie de otras cosas, como por ejemplo el estado higiénico de una persona. Aún así, el olfato nos puede transmitir cosas más profundas que el del estado físico del ser. Si alguien huele bien puede estimular el cerebro de tal manera que ese nos puede indicar muchos sentidos, entre ellos se pueden encontrar: el hambre, la simpatía, el bienestar y el amor.
         Si hablamos de un perfume, hablamos de una substancia que esconde o exalta el olor propio de una persona o un objeto con el objetivo de transmitir una buena imagen a la comunidad que le rodea, o por el simple hecho de querer oler bien, ya que produce un estado de bienestar al propio individuo. Este bienestar puede ser provocado a causa de que el olor del perfume es conocido y nos recuerda a cierta situación, cosa o persona. 
En mi opinión un perfume es como una parte del atuendo y de la imagen  personal que caracteriza a una persona. De esta manera, así como un traje o un vestido pueden  producir una buena impresión, de igual forma puede  pasar lo mismo con un perfume.  Además,  el mismo perfume puede  valorarse  diferente en cada persona  por  que los extractos y fragancias  se asocian  al entrar en contacto con la piel y  originan  una  respuesta distinta en cada cuerpo.  A causa de esto se trata de que en algunos hombres y mujeres las esencias pueden  olerse con mayor intensidad que en otros y a algunas personas el perfume puede  persistirles  pocas horas y a otras  durarles  mucho tiempo.
La mayoría de las personas pueden  conservar en su memoria las esencias y asociarlas con la persona que la usa. Por eso es que un perfume puede  expresar  demasiado de  tu persona.
         En el libro El Perfume nos podemos encontrar con un personaje que tiene el sentido del olfato muy desarrollado, más que sus otros sentidos. Jean-Baptiste Grenouille reconoce a su entorno a través del olor propio de cada animal, objeto y persona. El mismo ya desde que era un lactante no posea un olor propio. Para él, un hombre con el sentido del olfato privilegiado, es como si no tuviese una identidad. Para una persona que identifica a su comunidad a través de la vista, sería como físicamente no aparecer para las otras personas.
         Desde ahí comienza su obsesión por la creación de un perfume que contenga alma, la esencia de las cosas o de las personas. Grenouille quiere crear un perfume que se reconozca inmediatamente. La obsesión por crear este olor conduce que, para conseguir los componentes de su perfume perfecto, se vuelve en un asesino.
¿De dónde viene la obsesión del olor de parte de los seres humanos?
Para mucha gente, ser reconocido positivamente por otros individuos es una cosa muy deseada y va más allá del aspecto físico. Es decir que para crear una buena imagen o una imagen completa ante la comunidad ya no es suficiente ser una persona bella. Muchas personas creen que para dar esta imagen deseada también hay que jugar con los otros sentidos, sentidos como el olfato.
La idea de que Grenouille quiere llegar a elaborar un perfume para identificarse con él, puede significar muchos aspectos. En mi opinión, Suskind quiere mostrar la idea de que la gente cada vez más pretende ser reconocida por el olor y que incluso puede llegar a ser más importante que el aspecto físico.
Estamos acostumbrados a olfatear algo constantemente, desde los primeros momentos de nuestra vida en los cuales reconocemos a nuestra madre por su cercanía y por la utilización de la nariz reconociendo su perfume y olor, buscando el calor corporal que nos protege, hasta los momentos en los que disfrutamos de preparar una comida, pudiendo saber inclusive cuando encontramos un alimento en mal estado, alertándonos sobre su consumo por caracterizarse con un olor fétido.
            Esto nos permite entonces notar que existen algunos olores agradables, que inclusive pueden modificar el comportamiento que tengamos, como el momento en que estamos oliendo algún alimento cocinándose y se nos abre el apetito, mientras que en esta consideración podemos encontrar las fragancias y perfumes, siendo utilizados en el mundo de la cosmética mediante un vaporizador que permite su aplicación como perfume corporal, utilizando distintos elementos en su composición (aunque en su mayoría son de origen floral).
            Tal como hemos dicho, para poder percibirlo tenemos la acción del sentido del olfato, que tiene como piedra fundamental al órgano sensorial que es la nariz, realizándose un estímulo que es posteriormente enviado al sistema nervioso y éste lo lleva al cerebro donde se produce la percepción del olor, como consecuencia de haber sido absorbidos los elementos o partículas dispersos en el aire.
            Si bien la mayoría de las sustancias suelen contar con un olor característico, lo cierto es que también podemos encontrar partículas en suspensión que pueden carecer del mismo, siendo conocidas entonces como sustancias inoloras.
¿Cómo funciona el olfato?
            El sentido del olfato es un sentido químico. Se denomina sentido químico porque detecta compuestos químicos en el ambiente. Es importante saber que para que un cuerpo tenga olor es necesario que sea volátil; es decir, que emita pequeñas partículas químicas que se disuelvan en la mucosidad de la pituitaria. La intensidad de los olores depende de la mayor o menor cantidad de partículas volátiles emitidas. Los cuerpos provistos de olor se llaman odoríferos, y los que no lo tienen inoloros.
            Las moléculas del olor volátiles que están flotando en el aire llegan a las fosas nasales y se disuelven en las mucosidades. - debajo de las mucosidades, en el epitelio olfatorio, se encuentran las células receptoras especializadas cuyos nombres son pituitaria roja y pituitaria amarrilla. La pituitaria roja su función es la de calentar el aire. Mientras que la pituitaria amarilla se encuentra los receptores del olfato, que envían toda la información al bulbo olfatorio que se encuentra en la parte de atrás de la nariz. Los bulbos olfatorios tienen receptores sensoriales que envían mensajes directamente al cerebro.
            Los perfumistas o nariz, como son llamados por su increíble capacidad olfatoria, en definitiva son aquellos que imaginan un perfume y, gracias a sus conocimientos y desarrollo de su sentido del olfato los recrean. -la principal característica que tiene en cuenta una empresa de perfumes en el momento de escoger el candidato, es su buen olfato, y esto lo determina una serie de pruebas que se le hacen en este sentido.
            El olfato es un sentido muy importante ya que nos ayuda en muchas de nuestras vidas, puede llegar a salvarnos la vida y nuestra vida sin ella sería una muy diferente ya que no podríamos sentir esos aromas exquisitos de algunas comidas o fragancias como perfumes.

Bibliografía.
- Suskind, Patrick. (2000) El Perfume: Historia de un asesino. Ed. Seix Barral, México. 



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